Ante los anuncios por parte de Futbolistas Agremiados de Bolivia (Fabol) de que no se iniciaría el torneo de la División Profesional del Fútbol Boliviano por las deudas que tendrían algunos clubes, principalmente el equipo de Real Potosí, el presidente de la entidad "santa", Wilson Martínez, señaló que solo restaría algunas deudas con dos jugadores y un director técnico.
El directivo, mencionó que los sueldos adeudados a los jugadores por los meses de noviembre y diciembre de la pasada gestión ya habrían sido cancelados en su totalidad, además del personal administrativo, por lo que solo restaría saldar algunas deudas con dos ex jugadores del equipo orureño y un ex director técnico.
"De San José tenemos tres casos que son: Lizandro Alzugaray a quien le debemos 5 mil dólares, también hay un jugador de apellido Ramos que se tiene una deuda de 700 dólares y del entrenador Néstor Clausen donde solamente se le debe un sueldo, al parecer él se confundió y en la nota que nos envía dice que serían 24 mil dólares pero en realidad solo son 12 mil dólares", afirmó Martínez.
El titular de la entidad "santa" lamentó que cada vez que se acude a las reuniones de la Federación Boliviana de Futbol (FBF) o el comité técnico de la División Profesional del Fútbol Boliviano, siempre surjan nuevas deudas por parte de ex directivos que ahora la dirigencia actual tiene que asumir.
"No sacamos el dinero del tema de la televisación por temas de deudas de la anterior administración de Edwin Zeballos, y si me dieron el cheque de la Copa Sudamericana fue gracias a la amistad y los pagos que hicimos en su momento, porque si no seguían los descuentos, se habla de alrededor de 75 mil dólares que se habrían sacado a cuenta de un torneo internacional en la pasada administración, la verdad esto es algo que da bronca por todo lo que pasa por estos temas", indicó.
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