“Molesta, fastidia mucho y es triste”. Así describió el central de San José Marcos Barrera la situación por la cual atraviesa la plantilla de jugadores, que acumuló tres meses de deuda salarial. El equipo se entrena con normalidad para el cotejo ante Guabirá, este sábado en el estadio Jesús Bermúdez (15:00), pero con resentimiento ante la falta de soluciones creíbles por parte la dirigencia orureña.
“Es triste que San José, con una hinchada tan grande, no pueda salir adelante de este tema. Desde hace mucho tiempo entrenamos para hacer respetar esta camiseta, pero nos sentimos un poco solos”, añadió el argentino, que solo recibió 200 dólares de pago antes del partido ante Blooming.
El plantel orureño, que no asistió al amistoso con The Strongest como protesta, el domingo, no confía en la propuesta de plan de pagos del presidente, Edwin Zeballos. Los jugadores, pese a la situación crítica, buscan salir del mal momento en la tabla para que la gente vuelva al estadio y se tenga recaudaciones para cubrir parte de los salarios adeudados.
“Si empatamos o perdemos, no importa, yo en cualquier momento agarro mismo cosas y me voy a mi casa, pero nosotros nos quedamos porque el equipo ande bien, estamos comprometidos con esta institución y que la gente sepa que vamos a dejar todo en esta camiseta”, sostuvo Barrera, que será titular ante los azucareros.
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