Los consejeros departamentales comprobaron varias rajaduras y fisuras en la refacción del estadio “Jesús Bermúdez” que hace algunos días fue entregado de manera provisional.
Ángel Vargas, dijo que las observaciones se conocieron en una inspección técnica convocada por funcionarios de la Prefectura del Departamento, habiéndose constatado que existen deficiencias en el acabado de las orillas de los pisos y la misma infraestructura.
Los consejeros no pudieron opinar, por haber sido convocados a una fiscalización técnica, advirtiendo sin embargo, que en el piso existen muchas rajaduras, fisuras, desnivel y en otros lugares hundimientos.
“Como consejeros simplemente tuvimos que ver y no opinar, porque nos dijeron que la inspección era totalmente técnica, pero, vimos que las losas de los pisos tienen rajaduras y fisuras, hay varias observaciones de las que se tomó nota y consta en el acta que seguramente se realizó”, dijo.
Manifestó que responsables de la empresa constructora, reconocieron que las rajaduras se deben al ingreso de maquinaria pesada lo que provocó hundimientos, motivo por el que se comprometieron a realizar la entrega de forma completa y mejorar la obra.
Según Vargas sólo escucharon las observaciones y estarán al pendiente de lo que suceda en los próximos meses, tiempo en el que debe realizarse las refacciones comprometidas por la empresa.
PROYECTOS
Recordó que continúan realizando la fiscalización a las obras emprendidas por la Prefectura, como el caso de las obras del retén policial del mirador que se encuentra abandonado y que colinda con el Museo de Arte Sacro frente a la plaza Eduardo Avaroa. Otra obra que preocupa a los consejeros es el edificio de la Unidad de Radio Patrullas 110 que se encuentra en inmediaciones de la Terminal de Buses en la zona Noreste y que permanece abandonada entre diez a doce años.
“Nuestra gestión va acortándose, día a día que pasa, nosotros como representantes del municipio de Oruro, nos sentimos un poco preocupados, porque casi nada estamos haciendo, simplemente nos ocupamos de las inspecciones a todas las obras, eso es lo que nos
preocupa”, dijo.
Explicó que al trabajo de fiscalización no tiene el apoyo de la Prefectura, porque incluso no cuentan con una movilidad, no quieren brindarles una cámara fotográfica o grabadora para registrar el informe de cada inspección.
Manifestó que su obligación es exigir, supervisar, fiscalizar como manda la ley, para que las obras sean concluidas y lo que menos pretenden es perjudicar al prefecto Alberto Aguilar o a las empresas que se adjudican las obras.
“Hay empresas que abandonaron las obras, no se conocen las razones y nosotros como fiscalizadores queremos que esas obras continúen y se entreguen”, manifestó.
Ángel Vargas, dijo que las observaciones se conocieron en una inspección técnica convocada por funcionarios de la Prefectura del Departamento, habiéndose constatado que existen deficiencias en el acabado de las orillas de los pisos y la misma infraestructura.
Los consejeros no pudieron opinar, por haber sido convocados a una fiscalización técnica, advirtiendo sin embargo, que en el piso existen muchas rajaduras, fisuras, desnivel y en otros lugares hundimientos.
“Como consejeros simplemente tuvimos que ver y no opinar, porque nos dijeron que la inspección era totalmente técnica, pero, vimos que las losas de los pisos tienen rajaduras y fisuras, hay varias observaciones de las que se tomó nota y consta en el acta que seguramente se realizó”, dijo.
Manifestó que responsables de la empresa constructora, reconocieron que las rajaduras se deben al ingreso de maquinaria pesada lo que provocó hundimientos, motivo por el que se comprometieron a realizar la entrega de forma completa y mejorar la obra.
Según Vargas sólo escucharon las observaciones y estarán al pendiente de lo que suceda en los próximos meses, tiempo en el que debe realizarse las refacciones comprometidas por la empresa.
PROYECTOS
Recordó que continúan realizando la fiscalización a las obras emprendidas por la Prefectura, como el caso de las obras del retén policial del mirador que se encuentra abandonado y que colinda con el Museo de Arte Sacro frente a la plaza Eduardo Avaroa. Otra obra que preocupa a los consejeros es el edificio de la Unidad de Radio Patrullas 110 que se encuentra en inmediaciones de la Terminal de Buses en la zona Noreste y que permanece abandonada entre diez a doce años.
“Nuestra gestión va acortándose, día a día que pasa, nosotros como representantes del municipio de Oruro, nos sentimos un poco preocupados, porque casi nada estamos haciendo, simplemente nos ocupamos de las inspecciones a todas las obras, eso es lo que nos
preocupa”, dijo.
Explicó que al trabajo de fiscalización no tiene el apoyo de la Prefectura, porque incluso no cuentan con una movilidad, no quieren brindarles una cámara fotográfica o grabadora para registrar el informe de cada inspección.
Manifestó que su obligación es exigir, supervisar, fiscalizar como manda la ley, para que las obras sean concluidas y lo que menos pretenden es perjudicar al prefecto Alberto Aguilar o a las empresas que se adjudican las obras.
“Hay empresas que abandonaron las obras, no se conocen las razones y nosotros como fiscalizadores queremos que esas obras continúen y se entreguen”, manifestó.
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