LA PRENSASan José es campeón por doble partida. Por su equipo que logró el título en la cancha y por la hinchada, que lo obtuvo fuera de ella brindando un gran apoyo, como ninguno, porque no hay club en el fútbol boliviano que se precie de tener un “jugador número 12” como lo tiene el “Santo”.
Ayer, por supuesto los aficionados de la “V azulada” lo disfrutaron más, ya que el logro fue conquistado en su reducto. Los orureños y no orureños, fanáticos del popular equipo, llenaron de bote a bote el estadio Jesús Bermúdez, donde no cabía ni un alfiler más.
El club puso a la venta 32 mil entradas a las 10.00 y una hora y media después ya no quedaba ninguna. Se agotaron todas. A mediodía, las filas alrededor del estadio para el ingreso a las tribunas eran largas y más tarde se hicieron interminables.
Casi dos horas antes de iniciarse el partido, las tribunas presentaban un marco impresionante, como hace rato no se veía en ese escenario de la zona Norte orureña.
Desde el sector sur, La Temible, así denominada la barra organizada de San José, alentaba sin cesar. El grupo, conformado por unos 500 integrantes, nació hace 15 años y ha apoyado al equipo “en las buenas y en las malas”.
“Ya fuimos campeones en 1995 y volvemos a serlo ahora. Es lo más grandioso”, expresó anoche el cabecilla de la barra, Gastón Rivera, quien junto con Ariel Valverde, Raúl Rocabado y Raúl Colquehuanca organizan todo lo concerniente a La Temible.
Ellos se sienten también campeones “porque fuimos a donde el equipo fue y lo alentamos en todas las canchas”. De los 500 integrantes registrados, al menos 200 siempre se movilizan por todo el país y se unen a las hinchadas que San José tiene en el interior.
“Basta que nos comuniquemos por celular para que la barra de la ciudad que el equipo va a visitar se organice y se una a nosotros. Así lo hacemos y así vamos a seguir. Ahora pensamos viajar el próximo año al exterior, pues el equipo jugará la Copa”, agregó Rivera.
Según los dirigentes de la barra, son sus propios recursos los que permiten estar siempre al lado del primer plantel. “El club no nos da ni entradas, éstas las pagamos con nuestro dinero”. Sólo algunas empresas les dan fuegos artificiales, que anoche —en exceso, porque al parecer no hubo el control correspondiente— iluminaron la noche orureña saludando a su “San José, campeón”.
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